Durante este primer fin de semana de octubre la Red Bull Music Academy volvió a llenar las calles de Madrid de sonidos electrónicos y, como no podía ser de otra manera, allí que nos plantamos.En la que ha sido la primera edición de Weekender se ha podido disfrutar de interesantes conciertos como los de, entre otros, Fuck Buttons, Chris & Cosey (ex Throbbing Gristle) y Omar Souleyman. Es de agradecer que, teniendo en cuenta cómo está el patio, por un precio asequible se ofrezcan propuestas de tanta calidad como las programadas en el Weekender. Tan es así que el público ha llenado todos los shows.
Los propios organizadores señalaron al presentar el RBMA Weekender que el evento tenía un fin determinado: reiterar en su intento de agitar la escena electrónica de Madrid, tal y como vienen haciendo desde que en 2011 tuviera lugar la edición española de la Academy. Objetivo conseguido.
Hay que decir que para todos los que, como servidor, somos unos apasionados de la electrónica, los eventos organizados en Madrid por Red Bull se han convertido en nuestro leimotiv. Son como un halo de esperanza que periódicamente nos da alas para sobreponernos a las continuas decepciones originadas por las innumerables dificultades que nos vamos encontrando en nuestras andanzas musicales.
El jueves la ubicación escogida para dar comienzo a las jornadas fue el Teatro Kapital que albergó la actuación de tres artistas que los organizadores denominaron como crooners dislocados: Joe Crepúsculo (representante patrio en el evento), el estadounidense James Pants y el sirio Omar Souleyman. Extravagante comienzo para el Weekender.
Curiosidad: un colaborador de esta casa estaba interesado en que Mr. Souleyman le concediera una entrevista para su programa pero no le fue posible pues Omar sólo conoce la lengua árabe. Tras plantearse acudir al madrileño barrio de Lavapiés a buscar algún extranjero de tierras árabes que le pudiera echar una mano con la incidencia finalmente descartó la idea. ¿Se habrá entendido Kieran Hebden Four Tet con el sirio a la hora de llevar a cabo los trabajos de producción de su próximo lanzamiento? La incógnita se desvelará próximamente cuando se publique su nuevo trabajo.
En la segunda jornada, al Matadero. Nave 16, noche Cielo Oscuro del Weekender y de nuevo colgado el cartel de no hay billetes. Durante la tarde tuvieron lugar una serie de charlas sobre diferentes cuestiones relacionadas con la disciplina electrónica entre las que destacó la ofrecida por Andrés Noarbe dueño de la tienda de discos Rotor. Con un espectacular despliegue de luces, un sonido de muy buena calidad y algo de retraso sobre el horario previsto subieron al escenario Fasenuova, The Haxan Cloak y Chris & Cosey. Los primeros, de origen asturiano, presentaron en sociedad su nuevo lp que va a publicarse próximamente. Lo cierto es que quien esto suscribe es más partidario de las melodías que de los ruidos y gritos desgarradores y, aunque Fasenuova ejecutaron un buen set de directo, los zambombazos que fueron lanzando resultaron un tanto abrumadores.
Más disfrutamos con la actuación de The Haxan Cloak que dejó a toda la parroquia con la boca abierta. Por poner alguna pega decir que el directo de Bobby Krlic en algunos momentos se quedó un poco corto de intensidad, pero en general fue sublime y embaucador. En los últimos 10 minutos consiguió que el 90% de los asistentes entráramos en una especie de trance pseudo lisérgico. A ritmo de techno pop cerraron la noche Chris & Cosey de la mítica banda Throbbing Gristle, que estuvieron sólo correctos. Quizás se vieron perjudicados por la descarga de emociones con la que nos deleitó unos minutos antes el triunfador de la jornada, que sin duda fue The Haxan Cloak. Un diez para Fazeta, empresa encargada del sistema audiovisual del evento. Para rizar el rizo, en horario de madrugada, techno de alto voltaje en la sala Cool con los artistas de la etiqueta 50 Weapons Cosmin TRG y Benjamin Damage.
Sábado: tomemos el Rastro. Día grande del Weekender para los que somos fans de las fiestas en horario diurno, quizá porque la edad no perdona y las noches nos resultan más tediosas que en nuestros tiempos mozos. Desde las 11:00 de la mañana y hasta pasadas las 19:00 horas distintos djs actuaron por los aledaños de Ribera de Curtidores. Además tuvo lugar una feria del vinilo en la que participaron algunas de las tiendas de discos más reconocidas de Madrid y Barcelona como Discos Paradiso, Rotor o Upbeat. Mejor no entramos que nos quedamos sin fondos para el aperitivo.
Marcos incomparables fueron el precioso L.A. Estudio en el que BFlecha estuvo pinchando hacia las 14 horas de la tarde y la zona principal, el Centro Cultural La Corrala. En tal ubicación, por cortesía de Red Bull, todos los asistentes pudimos disfrutar de una cervecilla de invitación mientras escuchamos las sesiones de nada menos que Andy Votel, Ibon Errazkin o Pete Reilly de Souljazz Records. Sets eclécticos y exquisitas selecciones de, fundamentalmente, funk, jazz, y reggae. Por cierto, podréis escuchar la entrevista que tuvimos la suerte de hacer al señor Reilly en la próxima edición de Beatfull Day by scannerFM.
Después, a las 20 horas, Fuck Buttons reventaron el auditorio del Museo Reina Sofía. Tras la actuación de Sunny Graves, los de Bristol brindaron más de una hora de capas, texturas y drones con los que el dúo sembró una actuación exitosa. Gran puesta en escena con flashes de luces y una pantalla gigante en la que se proyectaban las misteriosas figuras de Andrew Hung y Benjamin John Power. El fin de la jornada tuvo lugar en Siroco con la actuación de Derrick Carter y Dj Panic que a ritmo de house de Chicago hicieron bailar al personal hasta altas horas de la mañana.
Domingo, gafas de sol en ristre, vuelta al Matadero. En la sesión de clausura RBMA apostó por artistas patrios como Monki Valley, C Tangana, Orphidal o bRUNA, que se encargaron de cerrar estos cuatro días intensos en los que la música electrónica ha vuelto a conquistar Madrid, además con una muy buena acogida de público.
Conclusión: otro éxito más para la marca de bebidas energéticas. En esta ocasión el gran acierto de los organizadores ha versado en la elección de las distintas localizaciones en las que ha tenido lugar el Weekender y, en especial, las escogidas en el Rastro de Madrid. Un placer poder combinar música electrónica y aperitivo cervecero con oreja guisada (en todos los sentidos) y otras delicias culinarias del centro de la capital. Equipo de Red Bull, ¿para cuándo la próxima? Esperando desde ya nos hallamos.
Para terminar, no nos resistimos a plantear una duda que nos corroe: ¿dónde está toda esa gente que acude en masa a los eventos de Red Bull cuando pequeños promotores llevan a cabo propuestas muy parecidas a las de la marca sin conseguir niveles de asistencia tan altos? Esperemos que efectivamente la agitación redbulera haga abrir los ojos al público y el respetable se dé cuenta de lo mucho que se puede disfrutar con la música electrónica menos convencional.
Álvaro Rivero (Beatfull Day by scannerFM) – Juan Prieto (Carga y Descarga)
